Mi Realidad

Capítulo 12 : La vuelta de Lucía

-Aun seguía con Natalia en su habitación el hospital y me empezó a contar que ella daba clases de piano, además de dar conciertos y que incluso le habían dado una oferta para irse a Nueva York y dar clases profesionales ahí...el único requisito era que tenía que aprobar todo con matrícula...cosa que aumentó su estrés.-

-Natalia...-Dije con una voz tímida
-Dime.-
-Me he estado preguntando desde hace mucho, el cómo supiste que besé a Nico...-

-Ella me sonrió levemente y dijo:-
-No lo sabía, lo intuía, tan solo eso.-
-¿Te molesta que yo le haya besado...?-Pregunté
-Me gusta Nicolás pero él y yo no somos nada, él puede tener novia y besar a quién quiera, no me molesta en absoluto.-
-¿Por qué te gusta tanto...? Es decir...sabes que él no siente lo mismo por ti.-
-En el corazón no se manda, Kairi.-Dijo riendo.-Y no puedo olvidarlo por arte de magia...-
-"En el corazón no se manda..."-Susurré en voz baja.-Natalia ¿Podrías darme el número de Nico?
-Claro, de paso te doy el mío y el de los demás.-

-Cogió un boli y arrancó una hoja de una libreta y me anotó los números.-
-Gracias Natalia ¿Cuándo saldrás del hospital?
-Seguramente este domingo, no te preocupes por mi.-
-Vale, entonces yo me marcho ya, me alegra saber que estamos en paz...-Dije mientras me levantaba de la silla.-

-Me marché del hospital y esperé en la parada del autobús, le enviaba mensajes a mi madre pero no me contestaba, así que aproveche mientras esperaba al autobús para llamar a Nicolás.-
-¿Sí?-Contesto Nicolás.-
-Hola soy Kairi...-
-¿Kairi? ¿Cómo tienes mi número...?
-Ha sido por Natalia...He ido hoy al hospital para visitarla.-
-Oh, me alegro...-
-Nico...¿Por qué nos estabas evitando hoy...?

-Se echó un suspiró al otro lado del móvil y no hablo durante unos segundos.-
-Verás Kairi...no he tenido hoy un buen día y tampoco he hecho muy buenas elecciones...es...-
-Me estás mintiendo.-Dije mientras le cortaba la frase.-
-Ahg, vale de acuerdo, tú ganas está vez Kari.-Dijo con una voz más calmada.-
-¿Qué ha pasado en realidad?
-Es Lucía, había hablado con ella el otro día y bueno, acabamos haciendo una absurda promesa...-
-Nico...-Dijo con algo de decepción.-
-Se suponía que si yo me alejaba de vosotros...ella dejaría en paz a Natalia y que le pediría perdón...-
-Y no ha sido así...-Dije suspirando.-¿Qué piensas hacer?
-Encontrar a Lucía y hablar de nuevo con ella...
-Hace días que no asiste al instituto ¿Sabes lo qué está tramando?
-Esa chica es medio imbécil y la parte restante consiste en maquillaje barato, no tengo ni idea en lo que piensa, si es que piensa.-
-Bueno Nico, te dejo.-Dije mientras observaba cómo el autobús se acercaba.-
-Hasta luego Kari.-Y acto seguido colgó.-


-Me subí al autobús y por suerte estaba casi vacío, me senté al fondo junto a la ventana, aun seguía mandoble mensajes a mi madre pero mi madre no daba señales de vida. Suspiré y observé todas las casas y edificios de la ciudad, me di cuente de que había un edificio muy alto pero estaba destartalado y viejo.-

-Ah, espero que pronto la derrumbe, no vaya a ser que haya un accidente.-Dijo una señora que hablaba con otra mujer.-
-Es un pena, si la hubieran mantenido sería uno de los edificios más bonitos de la ciudad...-
-Y de los más altos.-Le contestó

-Volví a mirar hacía el edificio que ya se encontraba lejos, pero aun así se notaba que era muy alto, me pregunto cómo serán las vistas desde ahí.-


-En cuanto llegue a mi parada y me bajé del autobús, por suerte mi casa no estaba muy lejos y pude llegar rápidamente. Abrí la puerta con mis llaves y parecía que no había nadie en casa, volví a mirar el móvil y nada, mi madre seguía sin contestar. Me senté en el sofá cansada y me fije que encima de la mesa había una bolsa blanca, supongo que será la bolsa dónde estarán las cosas del señor Trubs. Me levanté con pereza y miré dentro y efectivamente eran las cosas que compré está tarde, revolví las cosas para revisar de nuevo si estaba todo y me encontré con un móvil de color rosa, revisé los mensajes y era el mi madre.-

-Puff, no me extraña que no me contestase.-Dije aliviada.-

-Dejé el móvil encima de la mesa y me subí a la habitación, no me gustaba estar sola en casa, odiaba todo este silencio, sin pensarlo dos veces encendí mi ordenador y puse música lo más alto posible. Entonces mi móvil empezó a sonar, y al ver el nombre no pude echar una sonrisa.-

-Es una sorpresa que me llames, Dani.-
-¿Una sorpresa buena o mala?
-Buena.-Dije alegremente.-
-Entonces me alegró de haberte llamado, princesa.-
-¿Querías algo? O ¿Tan solo me has llamado para hacer la gracia?
-Simplemente quería escuchar tu voz...-Dijo susurrando.-
-Me puse totalmente roja, sin decir muy bien que decir.-
-Seguro que ahora estás colorada.-Dijo riendo
-P-para nada...-

-Dani echó una risa y dijo:-
-Bueno entonces ¿Qué hay de nuevo en tu maravillosa idea de que Dani y yo nos hagamos amigos?
-Amm...eso sigue en proceso, Dani mío sé paciente por una vez en tu vida, anda.-
-¿Dani mío? ¿Ya hemos llegado a esas confianzas?-Preguntó mientras reía.-
-Se habrá pegado tú modo de hablar.-Mentí, le llame "Dani mío" con mucha intención.-
-¿Seguro? ¿No será qué ya me tienes mucho cariño?-Preguntó con algo de curiosidad.-
-Dani, no empieces.-Dije fingiendo enfado.-
-Vale, vale, aquí eres tú la que manda princesa Kairi.-
-Dani, sin duda eres una persona muy curiosa.-Dije sonriendo.-
-¿En el sentido bueno o malo?
-Parte de ambas.-
-Me lo tomaré cómo un cumplido.-Dijo soltando una risa.-

-Estuvimos así durante un buen rato, hasta que apareció mi madre en mi habitación que miraba con mucha gracia, lo que me obligó a despedirme de Daniel en cuanto solté el móvil, la miré fijamente y le dije:-

-¡No me gusta y no es mi novio!
-El que se escusa sin ser preguntar, es que oculta algo cariño.-Dijo mientras me sonreía con picardía.-
-Mamá, no seas pesada.-
-Uy, perdona que me preocupe por conocer a mi futuro yerno.-
-¡Mamá!-Grité mientras me ponía roja a no más poder.-
-Ya paro, ya paro.-Dijo mientras reía.-He comprado hamburguesa así que baja a comer y ya me contarás que ha ocurrido con Natalia.-

-Le conté la mayoría de las cosas a mi madre y por suerte está vez no fui brutalmente interrogada cómo la otra vez, de todos modos contarle estás cosas me hacía sentir mejor. Al día siguiente, me levanté de nuevo temprano (por obligación de mi madre) y me dirigí a al instituto con la bolsa de los materiales. Esta vez en cuanto entré en clase Nico estaba charlando con Adam, me fijé que la mochila de Daniel estaba puesta en la mesa pero no se encontraba en la clase.-

-¡Hola chicos!-Dije mientras me acercaba a ellos.-
-Hola Kari.-Dijo Nico sonriéndome.-
-¡Espero que vuelvas a hacer alguna que otro estúpido trato con Lucía!-Exclamé algo enfadada.-
-Lo siento, lo siento sé que fui muy inocente al creerla...-
-¿Adam tú lo sabes?-Pregunté
-Desde luego, vino a mi casa y todo.-
-El pobre está un poco enfurruñado ya qué no le deje estudiar.-
-Eh ¡Dejaros de meteros conmigo porque estudie!
-Pff, algún día me tendrás que ayudar con las clases, eh Adam.-
-Por ti lo que sea.-Dijo mientras me volvía a revolver el pelo.-

-Por sorpresa nuestra por la puerta apareció Lucía con un gran moratón en el ojo y el labio un poco hinchado, nuestra cara de asombro era increíble. Ella nos echó una mirada fulminante (o al menos lo intentó con el único ojo que estaba bien) dejo su mochila y se fue sin decir ni una palabra. Al poco rato vino Cory y Sean que estaban también un poco aturdidos.-

-Acabamos de ver a Lucía y...-Dijo Cory.-
-¿Qué mierda le ha pasado en la cara?-Preguntó Sean
-Tampoco lo sabes ¿no?-Dije mientras miraba a Nico
-Eh, que yo no tengo ni idea, hablé con ella por teléfono.-
-¿Esta es la razón por la que no ha venido?-Preguntó Adam.-
-Aun así tenemos que hacerle unas preguntas a Lucía sobre Natalia.-Murmure
-¿Sobre el acuerdo ese?-Preguntó Sean mientras miraba a Nicolás
-Del acuerdo y también sobre lo que sucedió en clase el día en que se desmayo Natalia...-
-Ya os dije de que no teníamos que fiarnos de Lucía y las otras..-Dijo Cory mientras cruzaba los brazos.-
-De todos modos "a lo hecho pecho".-Dijo Adam.-
-Pero lo que más me llama la atención es quién es capaz de darle una paliza a Lucía.-Dijo Sean.-
-Desde luego no fue una chica a menos que, esa chica tenga las manos gigantes para hacer un moratón así.-Dije
-Entiendo que Lucía tenga un carácter de mierda pero...-Dijo Sean.-
-Pegar a una chica, no es una cosa que un hombre de verdad haga.-Dijo Cory serio.-
-De todos modos hablaremos con ella en el recreo.-Suspiró Adam.-