Sobre mí

Ya era hora de contaros cosas sobre mi ¿no?

¿Quién soy?
Soy una simple aspirante a ser escritora y claro esta soy mujer cosa que espero que ya sepáis.

-Mi edad no creo que importe mucho, pero os diré que no soy muy mayor (Menos de 20 y más de 13)
-Me escondo bajo el seudónimo SB, tiempo atrás dije que significan las siglas S y B, pero creo que esta vez me lo reservare.

¿Cómo soy?
Soy bastante callada, tímida y sensible, justo las 3 cosas que odio de mi. No soy ni muy alta ni muy baja, se podría decir que tengo la estatura media.

 Soy bastante delgada y eso que como bastante sobre todo dulces.
 Tengo ansiedad, no me puedo estar quieta, tengo que hacer algo ya que no soporto esa sensación de no hacer absolutamente nada aunque bueno, hay excepciones, a mi me encantan pasarme los domingos viendo películas desde el sofá sin salir de casa.

¿Qué me gusta?
Me considero bastante friki, pero si queréis imaginarme fea,con granos en la cara allá vosotros, si queréis ser superficiales os ofrezco la salida de este blog.

-Me encanta los juegos de pokémon "ESO SON JUEGOS DE NIÑOS PEQUEÑOS", estoy segura que más de uno lo ha pensado, pues no, conozco a gente de 19,20,22..etc gente joven (y no niños) a quienes le gustan pokémon y no, no son gordos granudos.

 Uno de ellos es youtuber, Folagor o Failagor o más bien Yoel Ramirez también está por supuesto El Rubius y en twitter hay a montones, en fin, me estoy desviando del tema.

-Soy fan de Nintendo y sus juegos Super Smash Brawl es un juego que me encanta porque "recopila" muchos personajes de Nintento, Kingdom Hearts es otro juego que me gusta y creo que poco más, admito que de videojuegos no sé mucho ni he jugado demasiados.

-Me encanta o más bien adoro el cine, hay tantas películas que he visto que se me es imposible elegir favorita, obviamente otra que cosa que adoro es es leer y escribir.

¿De dónde soy?
Nací en España y por lo tanto soy española.

¿Cómo me organizo a la hora de escribir?
Fácil, soy bastante ordenada y tengo una carpeta exclusiva donde tengo todos los borradores, ideas, capítulos de todo lo que escribo. Antes escribía a papel pero perdí todas mis cosas que tenía guardadas...ups...por suerte eran simples borradores.

¿Qué detesto?
Odio las personas egocéntricas, esas personas que se creen el centro del mundo, las personas que escriben mal, las mentiras, las peleas, el bullying y sobre todo la sociedad que hemos creado. La detesto.

He aquí una imagen que representa lo que hemos conseguido con nuestros estereotipos.

Y también aun seguimos con la homofobia, las guerra, casando a niñas de 8 años con viejos que la maltratan, el maltrato animal, el acoso escolar y debo mencionar que cada año los suicidios aumentan.
 "La tecnología avanza, nosotros retrocedemos"-alguien inteligente.

¿Qué redes sociales tengo?
Bajo el nombre de Sb, las únicas cuentas que tengo son en Wattpad y Gmail.
-Gmail : SEscritora@gmail.com
-Wattpad : @Sbescritora

Mi Ángel

Capítulo 1 : El principio del final

-Gracias Nathaniel – le dije después de unos minutos de silencio.

-D-de nada Sara ¿Pero...? ¿Por qué llorabas?-Dijo con nerviosismo

-Lloraba por que todos me llamaban monstruo...- dije mirando hacia abajo

-Pero tú no eres un monstruo eres un ángel. -Me volvió a repetir

-Le devolví la sonrisa, mientras le solté la mano.-

-Nathaniel... ¿Puedo llamarte Nath?

-Claro... - dijo ruborizándose.

-Nath ¿Sabes algún lugar para donde pueda vivir?

-¿Eh? ¿Por qué? - me dijo confuso

-Digamos que me peleé con mi familia y no quiero volver...

-Ahh...sé lo que se siente...pero...lo siento no conozco ningún lugar donde te puedas quedar...

-Yo le mire triste, él no entendía por lo que yo había pasado.-

-¡Ya sé! ¡Puedes quedarte en el orfanato que está cerca de aquí! Siempre están “adoptando” niños.

-¿Un orfanato...? No estoy segura de ello...-

-Bueno, pues no haberte escapado.-

-Le fulminé con la mirada pero pensé que sería mejor no decir nada.-

-Nath ¿Qué haces aquí? Serán como las 4 de la mañana...-Dije cambiando de tema

-Bueno...digamos que yo también me he peleado con mi familia...

-¿Así? ¡Qué casualidad! - dije sonriendo.

-Sentí como mi cuerpo pesaba más y como mis párpados se cerraban y se abrían continuamente,estaba demasiado cansada.-

-¿Estas bien? - dijo Nath preocupado pero aún así, note como a él también se le cerraban los ojos del cansancio.

-Solo...estoy... un poco cansada...

-Los dos nos caímos al suelo aun un poco húmedo, nos intentábamos levantar pero nuestro cuerpo lo impedía, nos miramos unos minutos y nos reímos. Yo me acurruque en suelo blando, pero estaba demasiado frío,  al parecer Nathaniel se dio cuenta y me dio su chaqueta.-

-Gracias – le dije mientras me dormía

-De nada....mi ángel.-

-Creo que escuche decir a algo pero no preste atención, me quede dormida junto a mi nuevo amigo  Nathaniel y podía notar como antes de dormir en mi cara había una gran sonrisa a pesar de todo.-

-Después de aquel día Nathaniel y yo fuimos grandes amigos,  cada día quedábamos bajo aquel árbol donde nos encontramos por primera vez. A los 7 años aún seguía en el orfanato  que me indicó Nathaniel. Gracias a las monjas, tuve una buena educación a pesar de no haber asistido a la escuela. Nadie quiso adoptarme en los años que estuve en aquel orfanato, aunque eso no  me importó. El orfanato era como mi nueva casa y las monjas mis padres, había aprendido y visto tantas cosas en ese sitio...-

-Poco a podo conocí nuevas cosas sobre Nath por ejemplo que sus padres son muy estrictos y que tiene una hermana que es una bruja (liberalmente). Nath, fue la única persona con quien he confiado incluso más que mi hermana Luna, a veces me preguntaba que le había pasado a ella y a mi madre pero cuando estoy con Nath se me olvida todo lo demás.-

-Pasaron 9 años cuando me fui de el orfanato para vivir en un ático que antes utilizaban las monjas, por suerte también encontré trabajo como repartidora de periódicos. Me levantaba muy temprano, pero eso no me importaba. A veces cuando salia a la calle algunos me conocían como “aquel monstruo” al principio me dolía pero acabe ignorándolo por completo. -

-Ya no me importaba lo que dijeran sobre mi, con el paso del tiempo mi carácter cambiaba poco a poco: En vez de ser alegre y risueña, era fría y distante. Nathaniel también cambio, ya no era un niño rebelde y cariñoso conmigo, se convirtió en un “don perfecto”. -

-Incluso cuando pasaba por mi antigua casa me entraba ganas de volver...pero algo me lo impedía quizá el dolor de aquel día, o solamente el deseo de ser libre.-

-Aparte de todo esto era feliz. He de admitir que gracias a Nathaniel conseguí ser libre y saber lo que es reírse o como ser feliz con un simple helado de caramelo. Hasta me matricule en un instituto público llamado “La Girola” pero la felicidad...no me duro mucho.-

-Cuando volvía del instituto, pensé en comprar algunas cosas. Se me hizo bastante tarde, ya que cuando salí del súper era de noche. Todo iba normal, iba tranquila por el camino hasta que...vi a mi hermana. -

-Su pelo era inconfundible, era de color negro como el azabache y tal largo que le llegaba hasta las caderas, casi ni se podía distinguir entre la noche, pero eso no era el asunto. Ella estaba intentado sacar un refresco de una expendedora de refrescos, le daba patadas, puñetazos pero sin éxito. Me acerque a ella para intentar sacar conversación o al menos ayudarla a sacar el refresco.-

-Si sigues así vas a romper la expendedora.-

-Que se rompa ¡Solo quiero mi refresco! - dijo sin mirarme aun, me fije en que ella también tenia puesto un uniforme como yo, solo que el suyo era de un colegio privado bastante conocido pero no le di gran importancia.

-Déjamelo a mi.- Me aleje un poco para coger carrerilla, me acerque corriendo y le di una patada a la maquina, acto seguido se pudo escuchar como se caía el refresco.-

-Vaya, muchas gracias la próxima vez utilizare ese truco.-Dijo dándose la vuelta, por fin pude ver su cara, era pálida como yo pero sus ojos eran de color azul claro parecía amigable pero en sus ojos pude notar tristeza.-

-¿Qué? ¿Tengo monos en la cara?

-No... ¿No te acuerdas de mi?

-¿Acordarme de ti...? Lo siento pero... no me suenas...-Dijo tocándose la barbilla mientras me miraba de arriba a abajo.-

-Di un gran suspiro, no era de extrañar cuando nos separábamos ella tenía 10 años y ya habían pasado 9 años desde entonces...-

-¡Ah! - dijo de repente

-¿Ah? - dije confusa

-¡Ah! ¡Ah! - dijo de nuevo

-¿Ah? ¿Ah? - le repetí, parecía un juego y todo

-¡Sa! ¡Sa! 

-¿Sa? ¿Sa? ¿Pero tu que te has tomado?-Dije asustándome

-¡SARAAAAA! - casi me dejo sorda del grito

-¡Aaaah! ¡En serio tu que te has tomado! ¡Si antes no te acordabas de mi!-Dije retrocediendo unos pasos hacía atrás.-

-Lo pone en tu mochila...- me dijo señalando donde tenía el nombre puesto “Sara Blue”.-

-¡Ahh! ¡Mamaaaa!¡Tenia que visitarla hoy!-Continuó

-¿Mamá? ¿Cómo esta mamá? Pensé que ella estaba...

-Sigue viva por ahora...

-¿Por ahora?-Dije con ojos de tristeza.-

-Si..está en estado critico...¡Ah! ¡Tengo una idea ven conmigo! 

- Me cogió de la mano y me arrastró hacia el hospital que había no muy lejos de aquel lugar. Entramos en el hospital y ella de nuevo me volvió arrastrar hacia  la puerta de la habitación donde estaba mamá.-

-¿Sabes? Mamá te hecha de menos desde....aquel día...se pasa los días llorando o con la mirada perdida en la ventana y se me a ocurrido llevarte hasta ella después de tantos años... al menos quiero que la veas antes de que se vaya...- me lo dijo con una sonrisa y más tranquila.-

-Vale, pero...

-Nada de peros ve y habla con ella.- Me dio un empujón entrando en la habitación.-

-Allí estaba, tumbada en la camilla con la mirada perdida en la ventana, tal como dijo Luna. Mi madre era igual de bella como la recordaba tenia la piel pálida y unos ojos profundos y grandes de color verde claro, como los míos. A diferencia de mi hermana y yo ella tenia el pelo castaño oscuro.-

-¿Mamá? - dije tímidamente

-¿Eres tú Luna? - dijo sin mirarme, su voz era  dulce y serena, añoraba tanto su voz...

-No, no soy Luna, soy... Sara...

-¿Sara...? - dije mirándome rápidamente,  se le caían las lágrimas de solo verme.

-Si, soy yo mamá....- dije derramando lágrimas... no pude evitarlo corrí y la abrace.

-¡¡Mamá te echado tanto de menos!! - dije sin poder parar de llorar.

-Yo también te echado de menos...pero vienes en mal momento... - deje de abrazarla y me senté en la silla que había al lado.

-¿Cómo que en mal momento? - se lo dije mientras me secaba las lágrimas.

-Me queda poco de vida... - dijo con la mirada perdida.

-¿¡Qué?! - no me podía creer lo que me estaba pasando después de  años sin verla, la tengo que volver a perder...-

-Verás... el día de incidente sufrí demasiadas heridas tanto físicas como emocionales...he estado interna durante muchos años...pero eso no me importa...Ya he cumplido mi último deseo y ha sido poder a volver a verte.-.

-¡No pasa nada! ¡Disfrutaremos lo que podamos!-Dije llorando como nunca

-Sara...por favor ya no hay vuelta atrás...

-Mamá...

-Sara yo te quiero, nunca quise hacerte pasar por todo eso yo..yo soy una mala madre.-Dijo llorando.-

-No digas eso...por favor...no eres una mala madre, ese hombre...ese hombre si que era el malo, mamá.-Dije sosteniendo su mano firmemente.

-Pero yo lo elegí y no supe detenerlo en cuanto te acuso llamándote monstruo...Hija quiero que tú sepas, que no eres un monstruo...TÚ eres un ángel....-

-No eres la culpable te lo digo de nuevo, no lo eres. Por favor, mamá cálmate.

-Mi madre se estaba poniendo cada vez más negativa y no entraba en razón...a este paso le podría dar algo.-

-No hija, son una mala madre...merezco morir...yo...-Comenzó a llorar desesperadamente y el marcador de los pulsos de su corazón empezaba a ir más rápido y a emitir pitidos continuos. Me levanté tan rápido como pude y toque el botón de emergencia, dos veces, tres, cuatro, cinco...pero...nadie venía.-

-Entonces los pitidos cesaron y con gran temor me di media vuelta, la miré fijamente y me acerque cuidadosamente, tenía miedo, mucho miedo.-

-¿Mamá? ¿¡Mamá?! ¡¡¡MAMAAAAAAA!! - grite y grite pero ella no movía ningún solo músculo, entonces en cuanto le cogí la mano, me rendí. Estaba muerta.-

-Cruce los brazos encima de la cama y me puse a llorar descontrolada. Los médicos entraron y al ver la escena taparon el cuerpo con una sábana blanca mientras me daban las condolencias ¿Dónde estaba mi hermana entonces? No lo sabía. Tan solo quería despertar de esta pesadilla continua.-

-No tardaron venir unas 4 enfermeras que no sabían si echarme o irse para dejarme a solas, 3 de ellas eligieron la última opción.-

-Con cuidado la 4 me cogió y apartó de la cama dándome las condolencias y con sigilo se llevaron a mi madre a la morgue. Se la llevaron...de nuevo me la quitaron...y no pude hacer nada igual que hace 9 años. Soy una inútil  ¿Por qué? ¿¡Por qué a mi?! era lo único en lo que pensaba.-

-Después de aquel día mi hermana y yo , nos comportábamos distantes. Ella me contó que su padre también murió en un accidente hace 2 años después de que me fuera. Desde entonces ella se quedo en un pequeño internado en las afueras y que a cada cierto tiempo venia aquí para recordar su infancia. Hablábamos muy poco entre las dos, poco a poco nuestra relación mejoro pero, creo que nunca volveremos a tener la misma confianza que teníamos de pequeñas.-

Novedades

->Novedades
Se aproxima una serie de grandes cambios en blog tanto como en las historias, diseños y a la hora de redactar y publicar.

Ante todo, os quiero avisar que "Mi Realidad" es el título que remplaza a "Rozando la Locura" (recordad que confundí estos 2 títulos porque las historias eran parecidas) y un gran error mio ha sido poner "En Busca de mi Esperanza" en vez de "Mi Realidad" os pido perdón, fue un lapsus que he tenido al escribir y editar.

Hablando de "Mi Realidad" el nombre de la protagonista al principio se llamaba Lorelei o Lore, pero el nombre no me acaba de convencer así que pensé en ponerle el nombre de Kairi o Kari haciendo un homenaje al juego "Kingdom Hearts" (Sí, me gustan los vídeo-juegos)

Para quienes no lo sepan Kairi es una de las protagonistas de este juego:

Kairi en KH2

Ahora hablemos un poco con el diseño del blog, estuve pensando durante mi larga ausencia...de que era todo muy oscuro, así que decidí hacerlo más claro. Aún estoy en proceso de ideas, así que si alguien me ofrece una ayuda estoy encantada. También pienso cambiar lo que es la imagen de portada.

Pienso hacer el blog más completo y como podéis ver en las pestañas de arriba, hay 2 nuevas secciones: Sobre mí y recomendaciones, supongo que ya sabréis lo que publicaré allí ¿no?

Ahora para finalizar está publicación os quiero avisar de que si me retraso con las novedades y capítulos es por una sencilla razón: Los exámenes (Estamos en el 3º trimestre,al menos en España, así que mucho ánimo)

He decido pausar un poco el blog (pero cada 2 semanas mínimo empezaran los cambios y las nuevas publicaciones) con el fin de que vosotros y yo no nos distraigamos. Falta poco para las vacaciones así ¡MUCHA SUERTE! Espero que a ninguno de vosotros no os quede nada para septiembre.

->Contacto

-Email: SbEscritora@gmail.com

-Wattap: @SbEscritora

Mi Realidad

Capítulo 4 : Personas llenas de sorpresas
¿Kairi? ¿Estás bien? -Me dijo Adam ladeando la cabeza a un lado.
-Sí..es que juraría haber visto algo-Dije volviendo la vista hacía el mismo sitio pero esta vez no había nadie ahí.-
-¿Ver el qué? ¿La gaviota comiéndose el bocadillo?-Dijo riéndose
-Eh..no nada déjalo.-Dije un tanto extrañada
-Por cierto Kairi...Tú no tenias la culpa de mi accidente, se te escapó la pelota y yo fui el estúpido que fue a por ella..-
-¡No! ¡No eres estúpido! ¡La estúpida soy yo! ¡Huí de ahí sin saber como poder ayudarte, sin saber si estabas bien!
-Ya...para, no te comportes como una niña, por aquel entonces tenías 8 años ¿Qué podías hacer? Estabas asustada, acabas de ver como mi cuerpo colisionaba contra un coche. Era totalmente normal que salieses de ahí corriendo, nunca te tuve rencor por entonces...-
-Pero te dolió.-Dije cogiéndole la mano derecha fuertemente.-
-¿El que la rueda de un coche me arrollase la pierna? ¡Qué va! ¡Me hizo cosquillas!-Dijo irónicamente.-
-No tonto, digo el que no te visitase.-
-Bueno, eso si que no lo niego...-Se paso la mano por su pelo y a continuación coloco su mano sobre la mía, que a su vez sujetaba la suya.-Pero...aún seguimos juntos, es lo que importa.-Dijo sonriendo.-

-Tenía una sonrisa tan bonita, parecía que nunca le había ocurrido nada malo y pensar que tan solamente tenía la pierna derecha mientras que la de la izquierda era una simple prótesis. Recuerdo ese día como si fuese ayer, yo botaba la pelota tranquilamente por calle pero un descuido hizo que se fuese a la carretera, Adam fue corriendo tras ella y ¡PAM! un coche se estampó contra él. La imagen de como Adam caía al suelo y como una de las ruedas derechas le destrozaba el pie izquierdo por completo se me quedo grabada en la mente. Grité un chillido y bastante gente se acumulo alrededor de él en cuestión de segundos, estaba paralizada, no sabía como reaccionar tan solo lloraba...me sentía horrible por mi culpa había sido atropellado. Salí corriendo de ese lugar, quería olvidarme de esa escena pero no podía.-

-Milagrosamente él sobrevivió, pero mi culpabilidad que tenía me detenían a la hora de visitarle. Quería o más bien deseaba verle y abrazarle, pero no podía, alguna que otra vez le espiaba desde la ventana mientras hacía rehabilitación o incluso mientras dormía pero nunca despierto.  Él gritaba mi nombre en los recreos, corría en mi busca o lo que le permitía la prótesis y yo huía de él, lo abandoné ese día y pensaba que me odiaba porque yo me odiaba a mi misma en esos momentos.-

-¡Ey! Parejita ¿Qué hacéis aquí?-Dijo Nicolás botando una pelota.

-¿Parejita? Ja, ya más quisiera salir con este pibón-Dijo Adam riéndose mientras tanto yo me ponía colorada.

-Si no sois parejita ¿Qué hacéis con las manos así?-Dijo Nico señanlando nuestras manos.

-¿Estás celoso?-Dijo Adam

-Ni de coña tío, déjate de memeces y ven a jugar que Pedro es un paquetilla jugando.

-Vale, vale, perdóneme usted majestad.-Dijo a risas mientras se levantaba con cuidado pero antes de soltarme la mano, se giro ante mí y con una de sus mejores sonrisas se despidió de mi, aquel gesto hizo que me deritiesa por dentro y ante mi asombro creí haber visto un poco de celos en la cara de Nicolás.-

-Increíble.-Susurré, mientras observaba jugar a Adam, tenía la agilidad de un huracán.-

-DIN DONG-

-Y ahí estabas el timbre que indicaba el final de la clase y el comienzo de la regañina del señor Trubs.-

-¡Señorita Kairi Fantine y Jorge Pedrusco! ¡Vengan aquí!-Grito el profesor desde la otra punta del patio.-

-Ambos nos dirigimos a él, yo con miedo y Jorge con vagancia.-

-¿Se puede saber a qué ha venido la pelea?

-Es Kairi, no sabe tomarse una broma bien.-Contestó Jorge

-Bueno, tú te metes todos los días conmigo, es normal que me harte.

-Son bromas.

-Para ti son bromas pero para mí es un infierno.-

-¿Y por qué no dijo nada? Podíamos solucionarlo sin peleas.-Interrumpió el profesor.-

-O sin darme en los huevos.-Susurró Jorge

-Controla tu vocabulario.-Le dijo el profesor con una mirada fulminante

-Perdón...señor profesor...-Se limitó a decir.-

-En todo caso vuestra conducta ha sido inaceptable, ambos tenéis una sanción y se os castigara.-

-¿Cómo? ¿Recogiendo la basura del recreo?-Dijo con tono de burla Jorge.

-No algo más divertido, limpiar los baños.

-¡Qué!-Dijimos a la vez.

-¡Ah! ¿Qué es demasiado para vosotros?

-Quizás un poco...-dije en voz baja.-

-Con qué sí eh...pues mira lo haréis por la tarde en vez de ahora.-

-Jorge se puso las manos sobre la cabeza y me miro con odio.-

-¿Alguna queja más?

-No...profesor...-Dijimos a coro

-El profesor se fue mientras nosotros nos fuimos al laboratorio.-

-Yo a ti te mato ¡Pa' que dices nada!

-¡Dios! ¡Cierra el pico! ¿O quieres que vaya a por otra pelota?-Dije

-No te recordaba tan agresiva.-

-¡Ni yo que fueras tan gilipollas!

-¡Pero quieres dejar ya de meter leña! ¡No siempre tienes que tener la última palabra!

-¿Y tú puedes tenerla?

-¡JODER! ¡Es imposible haber contigo!-Y a continuación de esto se fue corriendo de mi lado y con grandes pisadas.-

-Hoy definitivamente no es mi día...-Dije para mi misma mientras tocaba la puerta del aula.-

-Pasa y toma tu asiento-Me dijo una voz firme mientras me abría la puerta.-

-Asentí a mi cabeza y me fui al único sitio que quedaba libre que era justo al lado de la pared, detrás de las cotorras de la clase y a mi derecha tenía a Dani con Sergio. Todo el mundo estaba en pareja menos yo...como siempre...deje mi mochila en la mesa de al lado y la profesora empezó a explicar.-

-No tengo mucho que decir, la mayoría de la clase me la pase apuntando cosas y atendiendo, al menos aprovecharé este curso en cuanto a las asignaturas, lo único que me llamó la atención fue que casi al final de la clase recibí una notita de Nicolás, en ella decía que le esperase en la salida...¿Me pedira...? No, no...debería estar ciego o loco para pedirme salir...-

-¡Kairi!-Dijo una persona justo cuando iba a salir por la puerta y para mi sorpresa esa persona era Natalia.-

-Dime.-Dije cortante

-¿Es cierto?

-¿El qué?

-Que has besado a Nico...-Ante esas palabras me quede en blanco.-

-¿Yo? ¿Besar a Nico...?-Dije intentando entrar en calma.-

-Sí o eso me han dicho....-

-¿Quién?

-¿Si es mentira que importa quien lo haya dicho?-Dijo con una ceja arqueada

-No sé tú, pero a mi no me gusta que se inventen cosas sobre mí.

-Si ya bueno pero sigues sin contestar a la pregunta.

-Y lo seguiré haciendo porque he de irme a buscar a cierta persona.-

-Salí de ahí corriendo en busca de Daniel, ese cabrón ha contado todo seguro y encima la primera persona en enterrarse tenía que ser Natalia ¡Cómo no! Después de un rato estando buscando en todos los sitios lo localice entre la multitud del pasillo. Tuve que escurrirme entre las persona para poder alcanzarlo, había veces que el instituto me recordaba a un gallinero o un mercado de esos que siempre están muy llenos y gritando las ofertas del día.-

-¡Dani!-Grité, al parecer el tiene un oído muy fino porque vamos, me escucho a primera y estando muy lejos.-

-Se paró en seco en medio del pasillo y en cuanto me encontró entre todas las personas fue hacía mi dirección.-

-¿Pasa algo?

-¡Lo que pasa es que eres un cabrón!-Dije medio susurrando y medio gritando.

-Woah, cuida esas palabras señorita ¿De qué me acusas?

-¡De ser un chivato!

-¿Chivato? ¡Me hiere esa palabra!-Dijo en tono cómico.-Vamos, ahora en serio ¿De qué hablas?-Continuó.-

-Mire alrededor y decidí coger a Dani por el brazo y arrastrarlo por la multitud, al parecer a él le pareció gracioso se reía y a aparte no mostró resistencia en que lo llevara hasta otro lugar, a saber en qué estaría pensando...Lo llevé hasta el aula de plástica y cerré la puerta y me giré hacía él para decirle unas palabras:

-¿Quieres quitarte esa estúpida sonrisa de tu cara? Me pone nerviosa.-

-¿Nerviosa? ¡Sí has sido tú la que me has traído hasta aquí!

-Bueno, pero no pensaba que te lo ibas a pasar tan bien.

-¡Es que ser serio no es lo mío!-Dijo poniéndose las manos en el cuello.-Y bien, dime ¿Qué he hecho?

-Decírselo a Natalia.

-¿El qué?

-¿Cómo el qué? Tú lo sabes perfectamente.

-¿El rescate de tu príncipe? ¿El discurso que te dio? O quizás ¿El beso romántico...?-Dijo entre risas

-El intento de suicidio...-Dije cabizbaja

-Eso...eso está olvidado, no soy tan estúpido para divulgar eso.

-Entonces...¿Le has dicho sobre lo del beso?

-¡Para nada! No le he dicho nada a nadie ¿Entendido? Las palabras chivato y estudiar no están en mi vocabulario.

-No te creo...

-¡Pues es la verdad!-Puso sus ojos muy cerca de mi cara y me dijo:

-¿Te parece que estos ojos mientan..?

-Le mire fijamente los ojos y no tenían ningún resentimiento de culpabilidad ni nada por el estilo.-

-Pero...¿Entonces cómo lo sabe?

-Te diré una cosa y muy directa Kairi, tu "príncipe" tan solo es un capullo.-

-¿Nicolás?

-Sí y te digo que hay más personas que merecen tu amor.

-¿Ah si? ¿Cómo quiénes?-Dije sarcásticamente

-Dani miró dudoso hacia ambos lados y al final me miró durante unos segundos y decidió arrodillarse ante mi , me cogió la mano y dijo:

-Como yo, princesa mía.-Dijo con una gran sonrisa

-Me puse tan roja como los tomates y está vez si que me quede sin palabras.-

-Te digo que yo no he dicho nada sobre lo que ha pasado esta mañana ni lo haré, di después de esto no me crees, allá tú.

-Dani...¿Te me acabas de declarar...?-Dije con la voz temblorosa

-Quizás sí, quizás no.-Dijo con su sonrisa pícara mientras se levantaba.-

-Dani...-Dije riéndome

-Yo no miento a mis compañeros, a lo profesores sí, pero tú no eres ni lo uno ni lo otro.-

-¿Y...qué soy para ti...?-Dije sin entenderlo del todo.-

-Mi princesa y yo a las princesas nunca las traicionaría.-Dijo mientras me sonreía.

-Eres un amor Dani.-Dije con una sonrisa.-

-Lo sé.-Abrió la puerta del aula y se depuso a salir.-

-¡Prometemelo!-Grite

-¿El secreto? ¡Por supuesto!

-¡No! ¡El que yo sea tú única princesa!-No sé porque dije esa tontería pero tan solo lo dije.-

-Eso está hecho, princesa.-Dijo mientras se acercaba a mi y me plantó un pequeño beso en la mejilla.-

-Y dicho esto se marchó por la puerta con pasos de pato, tan gracioso como siempre. Mientras que yo, me lleve mis manos al pecho está calidez que sentía dentro de mi ¿Se puede saber que estaba sintiendo en aquel momento? Mi corazón palpitaba y mi cuerpo se sobresalto al sentir los labios de Daniel ¿Qué me estaba pasando?-